Es la comida más importante del día, pero solo uno de cada cuatro españoles la hace de forma adecuada y completa. Estos son los datos presentados este martes, Dia Nacional del Desayuno, en el informe ‘Estado de situación sobre el desayuno en España‘ por la Fundación Española de Nutrición (FEN) .

Un desayuno se considera completo cuando aporta más del 20% de la energía total que se necesita al día y que contiene tres o más grupos de alimentos básicos como leche y derivados, cereales y derivados y fruta fresca.

Los adultos de entre 18 y 64 años son los que más desayunos incompletos realizan (39%), seguidos de adolescentes y adultos mayores (35%) y niños (22%).

Por edad

Los hábitos en el desayuno cambian según se van cumpliendo años y se vuelven un poco más saludables. Aunque la fruta es el grupo de alimentos básicos menos consumido en el desayuno.

Entre los 9 y los 12 años los niños desayunan chocolate (el 75% de ellos), bollería y pastelería (59%) y pan blanco (42%) es lo que más desayunan. Además, la leche que los menores de estas edades toman son, en el 93% de los casos, entera o semidesnatada (48% y 45% respectivamente). Solo un 30% de ellos toma cereales de desayuno o barritas, mientras que, como alerta la FEN, tan solo el 9% de ellos toma fruta frusca.

Los adolescentes (13-17 años) siguen tomando chocolate, bollería y pastelería, pero en menor cantidad: un 64% y 55% respectivamente lo desayunan. Por su parte, el consumo de pan blanco aumenta hasta situarse en un 35%. Los cereales se siguen manteniendo y, en el caso del azúcar, pasa de un 23% a un 28% de consumo. Además, la fruta aumenta hasta alcanzar un 11% y se introduce un nuevo alimento líquido: café e infusiones.

El 67% de los adultos (18-64 años) toman café o infusiones durante el desayuno. El azúcar, la bollería y pastelería se toma en el 47% de los casos. El consumo de chocolate desciende hasta situarse en un 28%, mientras que la fruta fresca sube hasta el 15%. Un dato que sigue siendo bajo ya que se trata de un alimento básico para realizar un desayuno adecuado y completo.

Los mayores de 65 años toman más café e infusiones que el resto de grupos, el 77% de ellos lo hacen. Este grupo es el que más pan blanco come (52%) y el que menos bollería y pastelería (40%). Por su parte, el consumo de azúcar a primera hora de la mañana desciende y se sitúa en el 39%. Este es el grupo de edad que más fruta fresca consume por las mañanas: el 19% de los adultos mayores la toman diariamente.

Ir a clase sin desayunar

El 64,2% de los niños y adolescentes españoles no desayunan diariamente. Son las niñas de entre 9 y 17 años las que más dejan de hacerlo, un 35% de ellas no hacen la primera comida a diario mientras que en el caso de los varones esta tasa se sitúa en el 30%.

Tomar el desayuno depende de tres cosas: el nivel socioeconómico, el tipo de familia y el año en el que se haya realizado la encuesta. Los niños de familias de un nivel alto y con ambos padres tienden a desayunar más. Sin embargo, el año de la encuesta también influye puesto que los niños de 2006 desayunaban más que los de 2010, según los datos recogidos por el informe.

Duración del desayuno

La duración media del desayuno suele ser de 11,2 minutos (10,8 minutos en días laborales y 12,1 en fines de semana); los niños suelen realizarlo en el hogar y en compañía de la familia, mientras que en la adolescencia empieza a estar más presentes en instituciones y restauración, y la edad adulta se vuelve al hogar pero la mitad de las veces en soledad.

“El desayuno es un buen momento para mejorar la socialización y, además, realizarlo aporta importantes beneficios para la salud ya que ayuda a obtener la energía y nutrientes que se necesitan al día, equilibra la dieta y mejora el peso corporal”, ha detallado Varela Moreiras.

Del mismo modo se ha pronunciado el presidente de la Real Academia de Gastronomía (RAG), Rafael Ansón Oliart, quien ha destacado la importancia de educar desde pequeños en el hábito del desayuno desde los cinco sentidos: la vista, el olfato, gusto, tacto y el oído. “Los sentidos se educan y hay que dedicar tiempo a conseguir que lo sabemos que es bueno nos guste. Los niños tienen que saber inglés, pero también aprender a comer porque si no con 40 años se van a morir de un infarto hablando en inglés”, ha destacado Ansón Oliart.

Y es que, tal y como ha recordado, el 50% de la salud depende de la alimentación. Por ello, la directora de la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN), Teresa Robledo, ha insistido en la importancia de que los españoles recuperen los momentos del desayuno para, así, recuperar el diálogo con los hijos y con sus familias y, por ende, prevenir los problemas vinculados con una mala alimentación.

Finalmente, los expertos han recordado que el desayuno debe incluir leche y derivados, porque aportan proteínas de alto valor biológico, grasa, hidratos de carbono, vitaminas liposolubles, fósforo y calcio; cereales y derivados, que aportan hidratos carbono complejos, algo de proteína y poca grasa, así como vitaminas del grupo B y minerales; frutas, para obtener hidratos de carbono, fibra, vitaminas hidrosolubles (especialmente A y C) y minerales como el potasio y el fósforo; así como aceite de oliva virgen extra, tomate, frutos secos, huevos, jamón, mantequilla, café, miel, mermelada o legumbres.

Via: 20 minutos