Según un estudio publicado en la revista Science, los recuerdos emocionales no son permanentes en la mente humana, y pueden ser “borrados”. Es lo que afirma un grupo de investigadores de la Universidad de Uppsala en Suecia, quienes analizaron el proceso de aprendizaje o experiencia de una situación determinada y cómo afecta la memoria.
A través del estudio, los científicos Thomas Ågren, Mats Fredrikson y Tomas Furmark, revelan la forma en la que la persona crea una especie de memoria duradera a través de un proceso de consolidación, gracias a una proteína. Al recordar algo, se vuelve a repetir el proceso, sin embargo no recuerda fielmente el evento original, sino que la última vez que se pensó en ello. Los investigadores afirman que al interrumpir cualquiera de estos pasos, la memoria se disuelve.

Para la investigación se tomó a los voluntarios y se les presentó una imagen neutral, al mismo tiempo que se les entregaba una descarga eléctrica. De esta forma era evidente que debido a las repeticiones la imagen provocara un temor instantáneo en los observadores (la memoria del miedo), algo que podían sentir mostrando la fotos sin acompañarlo de ningún choque eléctrico.
Los grupos, divididos en dos, se sometieron a distintos tratamientos: a uno se le repitió varias veces la imagen, interrumpiendo el proceso de consolidación; y a otro -de control- no se les mostró la imagen permitiendo completar el proceso. Los resultados vía escáner evidenciaron que en el grupo experimental la memoria se hizo neutra y la proteína se había disipado, por lo que ya no se generó miedo.
En la práctica, este descubrimiento puede ayudar a mejorar los tratamientos de fobias, ataques de pánico, ansiedad y estrés post traumático, entre otros.
Via: MedicalXpress