Té de pomelo: Una taza de infusión de esta fruta 30 minutos antes de cada comida reduce el apetito y ayuda a descomponer grasas. Además, limpia el sistema digestivo y urinario. Se prepara muy fácil, lavando un pomelo, cortándolo en cuatro e hirviéndolo durante 1 minuto. Lo mejor es consumirlo inmediatamente para que no pierda sus propiedades y nutrientes.