(HealthDay News/Dr. Tango) — La temporada de las fiestas de fin de año también es la época de los ataques cardiacos, según advierte el Dr. Keith Churchwell, cardiólogo y director asociado del Instituto vascular y cardiaco del Centro médico de la Universidad Vanderbilt de Nashville, Tennessee.
Según Churchwell, una mirada a una base de datos estadounidenses sobre 53 millones de muertes ocurridas entre 1973 y 2001 revela que las muertes por enfermedad cardiaca alcanzan su punto máximo en diciembre y enero, y tienen picos en navidad y el primero de enero.

Las personas que tienen síntomas de problemas cardiacos antes de las fiestas de fin de año tienden a posponer la visita al médico.
“Lo hacen porque tienen obligaciones en casa, no quieren arruinar la diversión de las festividades, no quieren enfrentarse a la posibilidad de tener que ir al hospital y de que tengan que recibir atención durante las fiestas de fin de año. Debido a esto, es menos probable que acudan al médico durante este periodo para recibir la atención aguda que podrían necesitar”, aseguró Churchwell en una declaración preparada.
Durante las fiestas de fin de año, mucha gente interrumpe la dieta y los programas de ejercicios.
“Algunas personas han pasado cantidades significativas de tiempo durante el año tratando de cumplir sus objetivos cardiovasculares y, cuando llegan las fiestas, abandonan sus programas”, aseguró Churchwell. “Hay muchas explicaciones para esto. Es la época de las fiestas de fin de año, uno está ocupado, la cantidad de tiempo que uno pasa comiendo con amigos y familiares es superior a la habitual. Encontrar excusas para no continuar un régimen de ejercicios resulta más fácil”.
El consumo de alcohol puede aumentar durante esta temporada, cosa que puede contribuir a algo llamado “síndrome cardiaco de la temporada de fin de año”.
“El alcohol tiene un efecto tóxico sobre el músculo cardiaco de diversas maneras, pero, en particular, puede conducir a la irritación de los músculos cardiacos, en particular la cámara superior del corazón, las aurículas. Esto puede conducir a fibrilación articular, un tipo de arritmia que es un hallazgo típico del corazón de fin de año”, aseguró Churchwell.
También anotó que el paso acelerado de la temporada puede hacer que la gente olvide tomar medicamentos como anticoagulantes y antihipertensivos. Semejantes olvidos pueden conducir a problemas coronarios agudos.