La administración de una dosis baja de naproxeno junto con aspirina interfiere con el efecto antiplaquetario de la aspirina, reveló un estudio publicado online en Arthritis & Rheumatism.
Cuando se administró el antiinflamatorio no esteroide Naproxeno dos horas antes de la aspirina, la inhibición del tromboxano B2 fue significativamente más baja que cuando la aspirina fue consumida dos horas antes que el naproxeno.
Ese efecto fue mayor a las 24 horas después de la administración del naproxeno.

El uso de aspirina dos horas antes del naproxeno no alteró significativamente la inhibición del tromboxano B2, comparado con el uso de aspirina únicamente.
“Esto demuestra claramente que la administración del naproxeno 2 horas antes o después de la aspirina redujo la capacidad de esta última de causar una inactivación casi completa e irreversible de la COX 1”, dijo a Reuters Health la doctora Paola Patrignani, de la Universidad G. d’Annunzio, de Chieti, Italia.
El equipo de Patrignani investigó los efectos del uso de naproxeno en bajas dosis (220 miligramos dos veces por día) sobre el efecto antiplaquetario de la aspirina en un estudio abierto cruzado sobre 9 voluntarios sanos.
En 3 sesiones, con un intervalo de 2 semanas, recibieron: naproxeno 2 horas antes de la aspirina; aspirina 2 horas antes del naproxeno, o aspirina únicamente.
Los niveles de tromboxano B2 en sangre, una medida de actividad plaquetaria de la COX 1 como respuesta a la trombina, fueron los principales resultados del estudio.
El uso de naproxeno 2 horas antes de la aspirina alteró la supresión homogénea de la agregación plaquetaria inducida por el ácido araquidónico observada después del uso de aspirina solamente: 2 de los 9 participantes recuperaron por completo la agregación plaquetaria a las 48 horas de la administración de la dosis.
Los resultados fueron casi similares para la agregación plaquetaria inducida por el colágeno.
El naproxeno alteró también significativamente la recuperación de la biosíntesis del tromboxano B2, comparado con el uso de aspirina únicamente.
“Si un paciente recibe un tratamiento con aspirina en dosis bajas, se recomienda administrar la aspirina siempre antes que el naproxeno (por lo menos 1 hora antes; se necesitan estudios adecuados para definir ese período en el caso de la aspirina recubierta)”, destacó Patrignani.
“Nos gustaría realizar un estudio similar, pero más grande, sobre pacientes con enfermedad cardiovascular bajo tratamiento crónico con aspirina en dosis bajas y comparar los resultados para la aspirina con y sin recubrimiento entérico”, agregó.
Asimismo resaltó que “es muy importante confirmar la esta posible interferencia en la inhibición plaquetaria de la COX 1 y en la agregación plaquetaria que genera la coadministración de productos citoprotectores como los inhibidores de la bomba de protones con aspirina y naproxeno”.
FUENTE: Arthritis Rheum, del 2010.
Reuters Health