Las personas mayores que tienen problemas para permanecer despiertas durante el día corren un riesgo cuatro veces mayor de padecer accidente cerebrovascular (ACV), según informaron investigadores de Estados Unidos.El equipo también halló un peligro mayor de sufrir ataques cardíacos y otros problemas cardiovasculares en los ancianos que se duermen regularmente durante el día sin planearlo.

“Aún cuando controlamos cuestiones como la hipertensión, diabetes, actividad física, obesidad y nivel socioeconómico, descubrimos que las personas que tenían somnolencia diurna eran mucho más propensas a terminar con un ACV”, dijo Bernadette Boden-Albala, de la Columbia University en Nueva York.
El estudio con 2,153 adultos de un promedio de 73 años halló que el riesgo de ACV era 2.6 veces mayor entre quienes fueron clasificados como con “cierta somnolencia” durante el día, comparados con las personas “sin somnolencia”.
En tanto, los participantes en el grupo de “somnolencia importante” tenían 4,5 veces más riesgo de desarrollar un ACV.
La investigación, presentada en una conferencia de la Asociación Estadounidense de Accidente Cerebrovascular en Nueva Orleans, es una de las primeras que observa la relación entre las siestas no planeadas y los “eventos vasculares” como el ACV.
Otros trabajos revelaron que las personas con apnea obstructiva del sueño (AOS), que es una condición en la cual la respiración se interrumpe brevemente al dormir por la noche, corren más peligro de ACV. La AOS puede provocar somnolencia.
Alrededor de 700,000 adultos estadounidenses sufren ACV cada año, de los cuales unos 150,000 mueren.
Reuters / El Economista