Uno de los mayores avances de la ciencia es al mismo tiempo una de sus mayores tragedias.
Por primera vez hay una cura para una enfermedad que afecta más de 170 millones de personas en el planeta según la OMS.
Una enfermedad, la hepatitis C, que puede derivar en cirrosis crónica y trasplante de hígado.
Laboratorios en EE.UU. lograron en los últimos tres años lo que pocos creían posible, medicamentos que hacen desaparecer el virus que causa la enfermedad.

Pero el precio de estos remedios se negocia por separado, caso por caso, entre laboratorios y gobiernos.
Y el resultado de estos acuerdos ha sido denunciado por médicos y pacientes como un escándalo.
Uno de los nuevos remedios, Sovaldi, del laboratorio Gilead, salió al mercado en EE.UU a un costo de US$84.000 el tratamiento (es decir, US$1.000 la pastilla).
El mismo tratamiento se negoció con Egipto en US$500.
Gilead dijo a BBC Mundo que el costo se justifica por la necesidad de recuperar la inversión y continuar innovando.
¿Pero cómo es posible que sea tan colosal la diferencia en los precios? ¿Y qué significa para los pacientes hispanoamericanos?
En España, tras meses de protestas, marchas y ocupación de hospitales, el gobierno accedió a comprar los medicamentos.
Y en América Latina ya comenzó, con movilizaciones, la lucha por los remedios de última generación.
Mientras las negociaciones continúan, los enfermos de hepatitis C en Latinoamérica siguen entre el desasosiego y la angustia, esperando por un frasco de pastillas que puede salvarlos, pero nunca llega.
¿En qué etapa están las negociaciones en América Latina?
Brahm dijo a BBC Mundo que Sovaldi, que debe ser usado conjuntamente con otros remedios, ya fue aprobado en Chile y Brasil, pero “nuestro gran problema una vez aprobado es cómo va a ser el acceso”.
En Chile, donde se estima que hay cerca de 60.000 enfermos según Brahm, “compiten tres grandes compañías”.
“Los laboratorios estadounidenses son Gilead/Gador con Sovaldi (nombre comercial de Sofosbuvir), BMS, con Daclatasvir (Daklinza®) y Asunaprevir (Sunvepra®) y laboratorios AbbVie, con Ombitasvir, Paritaprevir-ritonavir y Dasavubir (Viekira pak®).
Brahm afirma que “la negociación en América Latina será asimétrica”. “En cada lugar los precios van a ser distintos porque depende en gran medida de la cantidad de enfermos, como ocurrió en Egipto donde fueron muchos enfermos y bajaron los precios porque en la cantidad iban a tener la ganancia”.
Brasil es el país de la región con más enfermos, más de dos millones.
“En Brasil hicieron un combo, sofosbuvir y daclatasvir, una unión de dos laboratorios”, dijo Brahm.
Michele Rest, vocera de Gilead, confirmó a BBC Mundo que se acaba de llegar a un acuerdo con el Ministerio de Salud de Brasil.
“El programa nacional de salud incluye el uso de Sovaldi+Daclatasvir por 12 semanas, Sovaldi+Simeprevir por 12 semanas o Sovaldi+Rivabirin por 12 a 24 semanas. El costo total de tratamiento de estos regímenes es US$10.000 por paciente”.
Gilead también afirmó a BBC Mundo que otros dos países, República Dominicana y Venezuela, aprobaron Sovaldi.
En Argentina, donde se estima que hay entre 400.000 y 600.000 casos, según el Dr. Silva, el Ministerio de Salud dijo que “Sovaldi no será aprobado porque es muy caro”.
No está claro aún cuál es la estrategia oficial, pero Rest dijo a BBC Mundo que “Gilead continúa proveyendo a la autoridad regulatoria local de Argentina, ANMAT, toda la información requerida y el proceso de revisión continúa”.
Genéricos
Los países de menores ingresos de Latinoamérica están incluidos en un acuerdo especial entre Gilead y laboratorios en India, a los que la compañía estadounidense permitió la fabricación de genéricos de Sovaldi y de un nuevo remedio que no requiere ser combinado, Harvoni.
Los genéricos serán distribuidos en el futuro a una lista de 101 países de bajos ingresos que incluye, en el caso de América Latina, a El Salvador, Paraguay, Bolivia, Cuba, Guatemala, Nicaragua y Honduras.
Via: BBC Mundo